lunes, 28 de agosto de 2017

Ya lo sé. Sé que no debo llamarlo, que ya lo hice demasiadas veces, que no debo volver.
Que tengo que seguir. Un paso atrás puede costarme muy caro.
Pero me ahogan las palabras, podría decirle que vuelva, que lo extraño, que podemos volver a empezar una vez.
Pero no puedo.
Y pasarán los días, y no me buscarás. Y pasarán los meses, y con otra persona estarás. Ya me habrás olvidado, ya no te importará. Ya no estarás triste. Pero no será mi piel la que acaricien tus dedos, dormirás junto a otro cuerpo, otros besos. Mirarás otros ojos, ''es que eres guapísima''. Tal vez recorrerás las mismas calles, pero esta vez agarrando otra mano.
Pero yo siempre tendré esperanza, por mínima que sea, de que llorará por mí, y no es que quiera que sufra, solo quiero que vuelva. Que vuelva a buscarme, que venga. Poder volver a asomarme y verlo bajo mi ventana.
Nada me haría más feliz.
Porque él me hacía feliz.
Ojalá recuerdes esos días, los buenos y los no tan buenos, pero esos en los que estuve a tu lado. Nunca quise soltar tu mano, pero se llenó de espinas que me impidieron sostenerla...

miércoles, 16 de agosto de 2017

¿Ya no te importa?
Que te quise como nunca quise a nadie. Que si hacía todo eso es porque estaba orgullosa, orgullosa de que hubiéramos superado tantas cosas...pero tú no.
Que te esperé a pesar de todo. Me quedé aquí, esperando a alguien sin saber muy bien qué estaría haciendo, me quedé preparando un poquito de mi amor, materializándolo todo lo posible para dártelo en mano.
Pero veo que no. Que no sirvió de nada, que no te parece motivo de orgullo o que prefieres otras lunas, otras estrellas, otros soles, ya no lo sé.
Y tampoco sé si quiero saberlo, así que me quedaré aquí, pensando en lo que podía haber sido y nunca fue.

martes, 11 de julio de 2017

Promesas eternas o un ''te quiero''

Las promesas pueden ser efímeras o eternas.
Yo soy de esas personas a las que les gusta pensar que son eternas. Tal vez no a simple vista, pero si una promesa es verdadera, siempre debe quedar algo de ella por ahí, tal vez muy escondido, casi imperceptible, pero por mínimo que sea, siempre quedará algo.
Estas promesas, pueden permanecer toda la vida así, escondidas. Pero a veces, al volver a una determinada situación, un momento, o un recuerdo, esa promesa vuelve a salir, en su totalidad, sin esconderse lo más mínimo.
Yo nunca te lo dije, pero me prometí a mí misma que te iba a querer siempre.
Han pasado muchas cosas terribles. Esa promesa debería romperse y desaparecer para siempre, pero era una promesa verdadera.
Puedo decir con la boca bien grande que te quiero. Y pasará el tiempo, y ya no podré decirlo. Sentiré que te he olvidado. Habré aceptado que todo esto ha acabado y que no debe volver.
Pero, cariño, si tú algún día vuelves, sé que esta promesa dejará de esconderse para siempre, y podré despertar cada día gritando que te quiero, así, sin más, sin pausas, sin frenos.
Una promesa eterna y un ''te quiero'' con toda mi alma, como un café caliente para empezar la mañana.


sábado, 8 de julio de 2017

A veces solo quiero que alguien me quiera.
Sin porqués, sin miedos, sin peros, sin pausas.
Los amores a medias cansan y a la larga te aspiran.
Una vez me dijeron: "El amor no tiene límites, no hay nada marcado ni definido, así que solo déjalo salir, no pongas tú los límites".
La verdad es que no le hice caso, pero llegaste tú y aun sin recordarlo lo hice, pero salí perdiendo.
Lo que no me dijeron es que dolía tanto, que me iban a romper en dos hasta seguir rompiéndome en mil pedacitos, para luego volver y pisar cada uno de ellos.

miércoles, 5 de julio de 2017

Quizás se le olvidó

Quizás se lo olvidó, que fui yo quien se quedó después de todo lo malo.
Vi el lado oscuro de la luna. Y me quedé.
Quizás se le olvidó cuando despertaba a su lado y le decía ''te quiero'' o esos abrazos de invierno.
Prefirió un placer frío, sin amor, vacío. Vacío...como dejó todo de mí.
Quizás se le olvidó mi mirada, mis ojos ahogados en lágrimas, ese cuadro y las cartas.
Tal vez es mi culpa por ver mi media luna donde no había ni estrellas. Esa media luna, que a día de hoy me cuesta hasta escribir... 
Que me amara de la misma forma que yo lo hice. Eso le pedí a la luna cada noche solitaria, pero salía el sol, ese que se reía de mí. La luna era mi único consuelo, mi única amiga. El sol solo me traía problemas. El sol me hacía ver la verdad, riéndose en mi cara.
-Nunca te querrá, acéptalo, idiota- me repetía una y otra vez.
Cuando estaba la luna, me miraba al espejo y me sentía bien, me sentía valiosa, sentía que me quería.
Cuando salía el sol me miraba y solo me daba asco, yo misma. Normal que él no me quisiera...
Sus besos traicioneros me absorbieron la poca confianza que me quedaba.
Resultó ser verdad lo que me decía el sol. Nunca me quiso, o hacía demasiado tiempo de eso.
Dicen que soy una sentimental, que lloro por todo, que exagero, pero créeme, cuando lo hagas con otra verás que no es igual, porque no se despertará a tu lado dándote los buenos días y diciendo cuánto te quiere.
Lo vas a lamentar.
Jugaste con mis sentimientos y mi amor, y ya no quiero verte. A ti no. De ti solo quiero una disculpa y arrepentimiento.
Porque a ti no te quiero.
Yo quiero a esa persona que me mostró la luna. 
Y a la luna le pido que salga y se quede para siempre, aunque sigamos lejos para siempre, aunque nunca esté a mi lado.

Te duele, me duele

Te va a doler.
Te va a doler que ya no quiera verte y tus noches sean más frías.
Que no voy a ser yo la que te quiere aunque ya no sé quién eres, pero eres uno más.
Que estuve siempre contigo y tú nunca conmigo, y ahora que por fin te digo adiós, sé que te duele, pero ya no quiero nada contigo.
Sé que te dolerá que mis besos y mis palabras más bonitas ya no sean para ti, que tu nombre ya no estará en mis rimas aunque de amor me muera.
Me esperarás por las noches pero yo no volveré, ya no puedes mentirme. Irás en esas noches enamorando mentiras, de esas que van y vienen, porque con otro clavo solo abrirás otra herida, de esas que no mueren.
¿Te enamoraste de mí? No lo tengo tan claro, pero si es cierto, te va a seguir doliendo.
Nuestros recuerdos aún vivirán por mucho que intentemos matarlos, pero a mí me dejarán de doler, mientras a ti te persiguen, como me persiguen hoy a mí.
Y aun así, verte perdido, aunque no me quieras, también me duele.
Te di mil y una razones para quedarte junto a mí, peleé hasta el final. Y aunque perdí, también perdiste tú.
También me duele, porque te quise tanto y el amor no se muere, y aunque quiera mentirte siempre seré la que te quiere. Cómo me duele.
También me dueles.


Egoísmo y ser humano

El ser humano se corrompe cada día más. Entre más tiene, más quiere.
Puedes dárselo todo, que siempre va a desear algo más.
Y la gente piensa: ''¿bueno, y dónde está el problema?''
Todos hemos sido egoístas alguna vez y lo seguiremos siendo. El problema es ese tipo de egoísmo, el más común, el que hace daño a los demás. Hace daño a gente que no debería.
Aunque no todos son así, algunos aprenden.
Pero el ser humano no tienen porqué ser humano, a ver cómo lo explico, existe el término ''ser humano'' como grupo nominal, pero algunos de estos seres humanos son cada día menos humanos. Más crueles, más egoístas. Mienten, engañan, traicionan, matan. Y todo esto para conseguir lo que quieren.
El ser humano cada día se intoxica más y más, y somos pocos los que seguimos siendo humanos.
Si eres una de estas personas, no cambies, pero ten cuidado, el egoísmo puede apoderarse de la persona que más quieres.